EL ‘MAGICO’: EL ‘BOSMAN’ LEVANTINO
EL ‘MAGICO’:EL ‘BOSMAN’ LEVANTINO
Aquí leyendo la nota de posponer el homenaje a Jorge Alberto González, luz de la selección de El Salvador, del Cádiz y del fútbol global. Aún se escucha el eco en todo el mundo de las historias de ensueño del ‘Mágico’ jugando al fútbol. Y en vida, de su asiento en el Olimpo del fútbol con Pelé y Maradona. Como también, del vacío de todos por su vida desordenada, "capando" entreno, libando con Camarón.
El ‘Mágico’, gitano, “calé”, como Camarón, como su “Cai”, marino, salado, quizás fue un hombre atrapado en la burocracia del negocio en los 80’ que lo hizo sentir hostigado y del cual se rebeló siempre. Quizás se sintiera más protegido por el sistema después de la Ley Bosman, escuchara el mensaje y se convirtiera en un hombre más maduro.
‘Mágico’, Bosman, los dos se preocuparon por ser libres en el negocio. Bosman desde la carencia de oportunidades, el ‘Mágico’ desde la gratitud de vivir.
Al final Bosman pospuso sonreír, o imaginar hacer otra carrera u ocuparse en un oficio. El ‘Mágico’ no. Bosman parece un perdedor, amargado, el ‘Mágico’ no.
La ley Bosman existe para hacer futbolistas libres y es un soplo de frescura para el futbolista, pero al que le viene más dulce, es al futbolista relajado, agraciado, feliz.
El ‘Mágico’ no disfrutó las abonos de las revoluciones de los 90’, como en Cádiz formar parte de un club gestionado saludablemente mediante la Ley del Deporte, o jugar en una competencia como es la Liga de Campeones en lugar de la arrugada Copa de Europa, menos tener una relación contractual suave mediante la Ley Bosman. Pero hubiera sido un modelo de armonía del talento en la élite cobijado por una gestión que lo hace más importante que a los ejecutivos esclavos de sus intereses. Todos dicen “Gracias Bosman por cambiar el mundo pero yo tengo prioridades”, Bosman dice “Yo cambié el mundo pero nadie me quiere” El ‘Mágico’ dice “Yo soy distinto, pobre. pero mejor que ser uno más”.
Y si el ‘Mágico’ comenzara en el negocio en el nuevo siglo, quizás vagara todavía en San Salvador, o siendo invitado a los eventos hechos para las leyendas del fútbol, pero viendo alguna oportunidad de madurar en su bohemia y en la burocracia que no tuvo antes de la nueva gestión de los deportes.
Comments
Injustamente, él jugó en aquella infame goleada por 10 a 1 de El Salvador con Hungría. Pero, fué parte de la jugada para el único gol de El Salvador en mundiales. :)