MI LEATHERCASTER FAVORITO

 MI LEATHERCASTER FAVORITO

Querido santidad. Este año pasé el curso de locución y redacción. El año que viene haré los cursos de televisión y     locución deportiva. Quiero de diciembre un maestro, educado, "gentleman", con traje y paraguas londinense en lugar de la camiseta de su equipo o el de sus compinches. Emérito del pizarrón, que conozca qué es "descoser", "paladar negro", "cola de vaca", sin vicios,  vulgaridades, muletillas, qué no relojéé o recite el tiempo de partido los tiros de esquina. Con quién sentarme a ver la Finalissima y el clásico del domingo en el potrero. Con quién tertuliar de "Los Cinco Grandes", "La Máquina, el "Fútbol Champagne". Que encumbre al jugador en lugar de perseguirlo. Que haya formado el Tándem con Morales, Viale, Araújo, Nelson, Pons, Vignolo, Cima, Giralt, Kuffner, todos los monstruos del micrófono. Que haya ido a todos los Mundiales o al menos desde Suecia 58'. Que se cubra de champán en vivo al aire con Francescoli, Bochini, Bianchi, Ramón y después descanse en un gran sillón en un salón grande de roble y piel de exportación a ver más clásicos. Que sea la esperanza del regreso de "Fútbol de Primera" por Canal 13, y sentarme como antes, como siempre, con mis papás y hermanos en una gran mesa después del "supper", la cena, el aperitivo, el digestivo a ver los héroes de los pibes. Escuchar otra vez el "Lo que viene lo que viene", "Cómo están muy buenas noches", que regrese el gran programa de fútbol por prime time así como ha vuelto el cotillón y los papelitos cuando salen los equipos. Quiero un ícono del fútbol y del oficio de vocero deportivo que ha perdurado por seis decenios y que dure seis decenios más. Lo quiero es un Rolls Royce tapizado con chófer, azafatas y lo recibiré con la familia en mi salón estilo francés con su piano para tertuliar sobre Argentina campeón y Messi y sus eternos.